Entrenar con frío duele, te duelen las manos, duele la barra, duele… El alma. Los más madrugadores, los de las 07:00 a.m saben lo que es coger una barra con hielo dentro de la nave donde está tu box. Entrenar así no es agradable como tampoco lo es hacerlo en un box a 40 grados.
El CrossFit es así, no se trata de gimnasios con calefacción o aire acondicionado, en la mayoría de los casos se trata de naves donde encontrarás una pequeña estufa en el baño para poder ducharte a gusto. Aunque no te lo creas entrenar con frío tiene algunas ventajas como que aumenta la pérdida de grasa y refuerza tu sistema inmunitario. Vamos a conocer todos los beneficios de entrenar con frío para que el frío deje de ser una excusa para no realizar el entrenamiento. índice de cotenidos Las bajas temperaturas han dejado de ser una excusa. Entrenar con frío acelera la pérdida de grasa porque tu cuerpo hará un mayor esfuerzo para mantenerse caliente. Se quema hasta un 30% más de grasa. Además, y aunque parezca todo lo contrario, estarás reforzando tu sistema inmunológico y tendrás menos posibilidades de coger gripes y resfriados. Correrás más rápido, ¿Quizá porque tendrás más ganas de llegar? Y entrenarás más duro ¿A lo mejor para entrar en calor antes? Correr a una temperatura inferior a 5 grados hace que el cuerpo desarrolle una mayor tolerancia a estas temperaturas y aproveche mejor sus recursos pero hay que aclimatarlo poco a poco. Por eso, el calentamiento en invierno es tan importante. Ahora que ya conocemos los beneficios nos preguntamos cómo prepararnos para hacerlo. Activa el modo cebolla y no te quedes en manga corta durante el calentamiento. Camiseta de tirantes, camiseta con manga o camiseta térmica, sudadera, pantalón corto y pantalón largo… Al gusto, pero utiliza varias capas que te irás quitando poco a poco. Trata de mantener la sudadera durante el calentamiento por lo menos. También te animamos a llevar un gorro durante la primera parte del entrenamiento ya que el 10% del calor corporal se pierde por la cabeza. Bebe mucha agua. Aunque no tengas sed. En invierno es más fácil mantenernos hidratados porque transpiramos menos por lo que mantener el cuerpo hidratado es más fácil. No olvides beber agua, antes, durante y después del entrenamiento. Al finalizar el wod, aunque la temperatura de tu cuerpo sea elevada, vuelve a ponerte la sudadera o te quedarás frío enseguida. Intenta que los descansos no sean demasiado largos para no quedarte frío y si tu punto débil es la garganta, te animamos a utilizar una braga para protegerla. Si sabes que toca correr o salir al exterior, apuesta ese día por camisetas térmicas. Motívate: Ir la box con frío no debe ser algo que cueste o que no te guste. Ve a disfrutar y a pasarlo bien. Entrenar con frío también te ayuda a mantener la mente despejada y a eliminar la sensación de cansancio o de tristeza. Puedes comenzar saltando un poco a la comba, no es necesario que hagas dobles, simplemente es para que el cuerpo vaya cogiendo temperatura. Puedes hacer algo de remo, correr y por supuesto… Burpees. Cuando entrenamos con frío, el calentamiento cobra especial relevancia ya que vamos preparando poco a poco al organismo para evitar lesiones y para un mayor rendimiento. Si ya estás resfriado, lo mejor es que no vayas a entrenar. Primero porque puedes contagiar al resto de tus compañeros y segundo porque puedes ponerte peor, a veces. Si tienes fiebre definitivamente quédate en casa pero si solo tienes un poco de congestión, entrenar puede resultar beneficioso. Eso sí, procura hacer los ejercicios de forma ‘más relajada’ menos repes, menos peso del que levantas habitualmente… Si te duele la garganta o ya estás tomando antibiótico, recuerda que la gripe se cura en cama. ¿Qué es frío? Quizá para alguien que nos lee desde Canarias, entrenar con 12 grados le parece que es frío, si nos lees desde Zaragoza, cero grados puede ser frío pero ¿Qué pasa con la gente que entrena en lugares similares a Invernalia de Juego de Tronos? En estos casos, hay que prestar más atención a las temperaturas. Es importante proteger manos, pies y orejas para evitar la congelación de las extremidades, te los podrás ir quitando a medida que vayas entrando en calor. Si vas a salir a correr, por la mañana o por la tarde, utiliza ropa reflectante. Es probable que cuando lo hagas sea de noche o que el día esté oscuro. Si puedes salir a correr los días de sol, aunque las temperaturas sean muy bajas, estarás recargando tu cuerpo de vitamina D. Recuerda darte protector solar o te quemarás la cara. O lo que es lo mismo, hacer que tu cuerpo tolere el frío. Si estás pensando en alguna competición o carrera de obstáculos es probable que te encuentres algo de agua en el camino. Incluso si vas a nadar en aguas frías. Algunas recomendaciones para poder soportar las bajas temperaturas bajo el agua son: Darte duchas de agua fría que irás prolongando en el tiempo o hacer inmersiones varias veces en agua fría y por supuesto, ¡Mentalízate! Sabemos que es difícil pero procura pensar que no hace frío, no tirites y no digas el frío que hace. Nadie dijo que fuese fácil. Si encuentras a alguien que te acompañe en todos estos procesos será mucho más llevadero. Estas duchas de agua fría, también ayudan a reducir el estrés porque favorecen la circulación de la sangre y propician que el cuerpo esté más relajado. Ahora que ya sabes cómo prepararte para entrenar con frío, éste no puede ser nunca más una excusa. Recuerda todos beneficios de entrenar con bajas temperaturas y mantén la moral alta ¡A por el frío!Beneficios de entrenar con frío
Cómo entrenar con frío
Ejercicios de CrossFit para combatir el frío
¿Y si ya estoy resfriado?
Entrenar con temperaturas bajo cero
Entrenamientos en agua fría para adaptarse al frío